
Cada restaurante y local siempre tiene a disposición tronas para los más pequeños y en las áreas públicas nunca faltan baños equipados con lo necesario para cambiar los pañales. En los museos, en las atracciones y en los transportes públicos siempre vienen propuestas tarifas familiares que permiten de visitar la ciudad con toda la familia sin gastar demasiado.
Una política, la de la extrema atención hacia los viajes de las familias, que tendría que ser tomada como ejemplo por muchas otras ciudades europeas. Justo en el jardín abajo del castillo hay también un hermosísimo jardín público con muchos juegos para los niños (y también para los padres…).
Antes de viajar con sus niños les aconsejamos de visitar también el sitio www.babyinbag.net, punto de referencia en internet para viajar con los niños.